lunes, 7 de junio de 2010

El rastro de Tetuán

.
El rastrillo de Tetuán tiene debe su origen a los primeros asentamientos de mercaderes que se instalaron en el barrio de Tetuán tras la llegada victoriosa de las tropas de África a Madrid.


Como mucha gente empezó a pasar por esta zona cuando las tropas volvieron atravesando la Dehesa de la Villa, algunos vieron la gran oportunidad de vender comida y trastos por las calles de Bravo Murillo. Más tarde los traperos también se instalaron en el barrio vendiendo todo lo que encontraban a su paso. De ahí se empezó a crear la costumbre de vender en la calle y surgió el rastro de Tetuán.


Hasta hace poco, el rastro de Tetuán se podía ver todos los Domingos y festivos a lo largo de la calle Marques de Viana, pero las obras en la zona lo movieron hasta la Avenida de Asturias en Plaza de Castilla. Ahora pasa por el mucha más gente que antes.


Me gusta mucho más el rastro de Tetuán que el de Cascorro. Este es más pequeño pero más bonito y auténtico. Encuentras todo tipo de ropa a partir de un euro y fruta, mucha fruta.

Nunca compro nada pero me molan los rastrillos.
.

1 comentario:

Winnie dijo...

Desdeniña iba a el rastro de Tetúan acompañando a mi padre en la búsqueda de discos (LP) de música clásica.....Qué tiempos!!! besos